Las principales firmas niponas de telecomunicaciones han decidido no emplear equipamiento de empresas chinas para desarrollar redes de telefonía móvil 5G, después de que Tokio anunciase un veto a las mismas por las dudas sobre su seguridad. Softbank, NTT Docomo y KDDI prescindirán de tecnología china para desplegar la infraestructura de telefonía móvil de nueva generación, al igual que el gigante de comercio electrónico Rakuten, que tiene previsto entrar en el sector de las telecomunicaciones el próximo año, según publica el diario económico nipón Nikkei. El bloqueo del sector privado nipón a empresas chinas está en línea con la exclusión de las mismas de contratos públicos por parte del Ejecutivo, una medida que fue confirmada en la víspera por el primer ministro japonés, Shinzo Abe.

“Es extremadamente importante que evitemos comprar equipamiento que incluya funciones maliciosas, como el robo o la destrucción de datos o la suspensión de los sistemas”, afirmó Abe en declaraciones a los medios nipones, después de que el Gobierno aprobara esta medida el lunes en una reunión sobre ciberseguridad. Aunque el Ejecutivo no aludió a ninguna empresa ni país en particular, el veto afectará principalmente a Huawei y ZTE, dos empresas chinas que fueron objeto de una prohibición similar de Washington y que contaban con importantes proyectos en Japón para desarrollar redes 5G y otro tipo de equipamiento.

EFE