El festival de cine de Berlín (Berlinale) hará hincapié en su edición de este año –la 70–, que empezará el 20 de febrero, en la diversidad, anunciaron sus directores.
“La historia de la Berlinale es la de la consciencia de todas las diferencias que existen, no solo en la industria del cine, sino en la vida” en general, declaró el italiano Carlo Chatrian, que dirige el festival junto con la holandesa Mariette Rissenbeek.
Hollywood puso de manifiesto que, en el sector del cine, la mayoría de los galardonados son blancos. Sin embargo, los dos directores, que sucedieron a Dieter Kosslick al frente del certamen tras 18 años, prometieron reflejar y “abrazar” la diversidad, ayer.
Entre los 18 filmes en competición por el Oso de Oro este año, solo seis fueron dirigidos por mujeres, es decir, menos que en la edición de 2019, aunque Kosslick había prometido paridad para la edición de 2020.
Hasta el 1 de marzo, el jurado, que estará presidido por el actor británico Jeremy Irons, tendrá que dirimir entre películas como The roads not taken de Sally Potter, en la que participa el español Javier Bardem, y la última obra del alemán Christian Petzold Undine.
También se presentará, a título póstumo, El tango del viudo y su espejo deformante, una película que el cineasta chileno Raúl Ruiz, fallecido en 2011, empezó en 1967 y que dejó sin terminar por falta de fondos.
El certamen contará con la presencia de la actriz estadounidense Sigourney Weaver, protagonista de My Salinger Year, del canadiense Philippe Falardeau.
AFP