La 33 Feria Internacional del Libro de Moscú abrió hoy sus puertas al público en el céntrico pabellón expositivo Manezh, a pocos metros del Kremlin, con medidas sanitarias para evitar nuevos contagios de COVID-19 en la capital rusa, foco de esta enfermedad en el país.
“La epidemia ha obligado a modificar las tradiciones de la Feria del libro, que se vio obligada a trasladarse a la Sala de Exposiciones Manezh. Otra novedad es la realización simultánea de la feria en formato presencial y digital”, declaró el director de la Agencia Federal de Prensa y Comunicaciones de Rusia, Mijaíl Seslavinski, citado por TASS.
Según Seslavinski, todas las actividades que tendrán lugar entre el 2 y el 6 de septiembre en el marco del evento, “se transmitirán en el sitio web oficial de la Feria y en las redes sociales”, lo cual permitirá un mayor alcance de público.
En la presente edición de la Feria se presentarán decenas de miles de libros de más de 300 editoriales de toda Rusia, que podrán ser adquiridos a precios preferenciales.
El país invitado de honor del evento es Corea del sur, que presentará una amplia excursión online de su universo editorial en el marco del programa Future-ing (El futuro hoy).
Aquellos que decidan visitar la feria de modo presencial solo podrán adquirir las entradas en la red y deberán acudir al Manezh con mascarilla y guantes.
El recinto expositivo será periódicamente desinfectado y los visitantes tendrán acceso a medios desinfectantes para las manos.
La Feria Internacional del Libro de Moscú se realiza desde 1977 y es el mayor evento de este tipo en Rusia y Europa del Este.
Fuente: EFE
