Como parte del recorrido del personal técnico de MiAMBIENTE, en las zonas afectadas por los efectos colaterales del huracán ETA en Chiriquí y la Comarca Ngäbe-Buglé, se pudo conocer que los daños en las cuencas hidrográficas de los ríos Chiriquí Viejo, Fonseca, Tabasará, Chiriquí y Chico, principalmente se debieron en gran parte a efectos del cambio climático, que cada día serán más repetitivos y fuertes debido a las malas prácticas del hombre.

José Victoria, director nacional de Seguridad Hídrica de MiAMBIENTE, expresó que: “en la cuenca alta del Río Chiriquí Viejo, donde se dieron los daños principales, fue la falta de prácticas más intensas y dispersas de conservación de suelo, y agua de escorrentía, la alta saturación de los suelos por las lluvias intensas y repetitivas, deslizamientos de áreas de cultivo y boscosas, ubicación de parcelas, altas pendientes, entre otras las principales razones por la que se dieron las afectaciones.

El ingeniero añadió, que “el factor detonante de los daños materiales de infraestructuras se debió a la invasión de tierras en zonas inundables con edificaciones de estructura (casas, puentes, carreteras, etc.) sin dejar el bosque de galería de protección. Ello fue una de las razones que propició la pérdida de viviendas, vidas humanas y demás estructuras como línea eléctricas y vías comunicación”.

Desde el domingo ocho hasta el viernes 13 de noviembre, equipo de Mi AMBIENTE sede central y las direcciones regionales de Chiriquí y comarca Ngäbe-Buglé recorrieron las zonas afectadas y utilizaron drones, equipos técnicos para verificar la huella de afectación desde sus orígenes, hacer los cálculos y estimaciones.

 

Fuente:  MiAmbiente