En la Escuela Nacional de Ciegos Helen Keller, perteneciente al Instituto Panameño de Habilitación Especial (IPHE), los estudiantes participan en un programa de estimulación visual diseñado para desarrollar y optimizar sus capacidades residuales. Este programa se centra en el entrenamiento de funciones visuales como el enfoque, la fijación, el seguimiento y el reconocimiento de colores, formas y tamaños. Además, los alumnos aprenden a discriminar imágenes complejas con diferente información visual.
La profesora Alma Pinzón, coordinadora del Centro de Estimulación Visual, lidera este programa. Su trabajo se enfoca en la motricidad fina “ojo-mano”, haciendo especial hincapié en el esquema corporal del rostro y la ejercitación de la motilidad ocular. A través de ejercicios específicos, los estudiantes fortalecen los músculos oculares, mejorando su control y precisión.
El propósito fundamental de este servicio de estimulación visual, es enseñar a los niños a maximizar su remanente visual. Se busca que cada estudiante aprenda a utilizar su eficiencia visual de manera óptima, tanto en tareas de visión cercana como intermedia y lejana. Este entrenamiento les permite comprender mejor los estímulos visuales de su entorno, mejorando su interacción con el mundo que les rodea.
Gracias a la estimulación visual, los estudiantes pueden desarrollar una mayor independencia y autonomía. La mejora en sus habilidades visuales les permite participar más plenamente en actividades educativas y cotidianas, facilitando su aprendizaje y su integración social. El programa se adapta a las necesidades individuales de cada estudiante, garantizando un enfoque personalizado y efectivo.
El IPHE, a través de este programa, reafirma su compromiso con la inclusión y la educación de calidad para todos sus estudiantes. La estimulación visual, representa una herramienta valiosa para mejorar la calidad de vida de los niños con discapacidad visual, potenciando su desarrollo y autonomía.
Fuente: IPHE