Washington (EFE).- Las autoridades descartaron este jueves que haya supervivientes del accidente aéreo ocurrido anoche por la colisión entre un helicóptero militar y avión comercial con 64 personas a bordo, que se precipitaron en las gélidas aguas del río Potomac.
El jefe de bomberos y servicios de emergencia de Washington, John Donnelly, informó hoy que no hay supervivientes del accidente y que los equipos de rescate, que han trabajado toda la noche en las gélidas aguas del río, han pasado de «una operación de búsqueda y rescate a una de recuperación».
«En este momento no creemos que haya supervivientes. Hemos recuperado 27 personas del avión y una del helicóptero», agregó Donnelly.
Un helicóptero militar Black Hawk, con tres personas a bordo, y un avión comercial Bombardier CRJ700 de American Eagle (filial regional de American Airlines), con 60 pasajeros y cuatro tripulantes, colisionaron en el momento de la aproximación de este último a la pista 33 del aeropuerto Ronald Reagan (DCA).
La tragedia aérea más grave en décadas
Este es el accidente aéreo más grave en EE.UU. en casi 24 años y según el secretario de Transporte, Sean Duffy, «era evitable», aunque la investigación todavía está en marcha.
El vuelo 5342 de American Eagle, aerolínea regional subsidiaria de American Airlines, procedente de Wichita (Kansas), realizaba la aproximación al aeropuerto Ronald Reagan de la capital estadounidense cuando, a las 20:48 hora local del miércoles, chocó con el helicóptero militar en el que viajaban tres personas.
Según la Federación de Patinaje Artístico de Estados Unidos, algunos de los pasajeros eran patinadoras y patinadores, entrenadores y familiares que habían participado en un campeonato celebrado en Wichita.
En otra rueda de prensa, la alcaldesa de Wichita, Lily Wu, informó sobre los recursos disponibles para las familias afectadas por la tragedia y expresó su solidaridad con la capital de EE.UU.
«Esta terrible tragedia unirá para siempre a Washington D.C. y Wichita, Kansas», afirmó.