Un estudio internacional ha constatado que el desmantelamiento de residuos electrónicos expone a contaminantes peligrosos para la salud, especialmente algunos de los compuestos que se usan para aislamiento de cables, carcasas de plástico, paneles LCD y tableros de circuitos de equipos eléctricos y electrónicos.
El estudio, liderado por la investigadora Miriam Diamond, de la Universidad de Toronto (Canadá) y publicado en la revista Science of the Total Environment, ha evaluado la exposición de los trabajadores de desmantelamiento de residuos electrónicos en Dhaka (Bangladesh).
Los investigadores midieron la exposición de quince trabajadores de entre 14 y 60 años, a distintos plastificantes y retardantes de llama mediante dos métodos de muestreo: pulseras de silicona hechas con polidimetilsiloxano y camisetas de algodón para estimar qué fracción de sustancia química acumulada en la ropa podía penetrar en el organismo a través de la piel.
El estudio examinó compuestos utilizados en el aislamiento de cables, en las carcasas de plástico, paneles LCD y tableros de circuitos de equipos eléctricos y electrónicos.
Los investigadores hallaron 23 compuestos diferentes en todas las muestras analizadas, así como concentraciones relativamente altas en las pulseras y camisetas de los trabajadores, en las que cada dos horas se acumulan hasta 2 microgramos de estos compuestos por cada 10 centímetros cuadrados de superficie.
Entre las sustancias con mayores niveles de concentración destaca el difeniléter prolibromado Deca-BDE-209, un retardante de llama prohibido internacionalmente por la Convención de Estocolmo y cuyo reciclaje en los artículos que lo contienen está permitido solo hasta 2030.
También se hallaron niveles elevados de otros plastificantes organofosforados relacionados con posibles efectos cancerígenos y neurológicos, como el TDClPP, el TCEP y el TPHP, según el estudio.
Fuente: EFE