El 26 de enero, el mundo celebra el Día Mundial de la Educación Ambiental. Este año 2019, coincide con la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), y con la visita del Papa Francisco a Panamá, creador de la Encíclica Laudato Si, en el año 2015, dedicada a los graves problemas socioambientales del mundo, y al cuidado del planeta tierra. Al respecto, la JMJ, le dio a la sociedad panameña, un llamado de atención: no ensucies, no tires basura al suelo ni a la red hídrica, ya que estás contaminando los ecosistemas del país. Jóvenes provenientes de distintas partes del mundo, limpiaron playas panameñas tal como también, lo han realizado, varias organizaciones del país.
La basura es solo una de las puntas de la crisis ambiental de Panamá, la grave deforestación de nuestros bosques con sus impactos consecuentes como la erosión, sedimentación, contaminación de la red hídrica y destrucción de la biodiversidad, entre otros. La deforestación, además impide la absorción del CO2 que emiten los vehículos e industrias con chimeneas, lo que contribuye al cambio climático y al calentamiento global. El 50% de la huella ecológica de Panamá, es por la emisión de CO2.