Las especies de vida salvaje se han reducido un 58% en los últimos 40 años, desde 1970, según el «Informe sobre el planeta vivo» divulgado por la Sociedad Zoológica de Londres (ZSL) y la organización independiente por el medioambiente WWF.
Luego de la reciente divulgación de este estudio, grupos conservacionistas alertaron de que la naturaleza afronta una posible extinción en masa por primera vez desde la desaparición de los dinosaurios.
Las cifras aportadas en el documento revelan que los animales que habitan en lagos, ríos y pantanos son los que están sufriendo las mayores pérdidas.
Entre los factores que contribuyen a ese declive figuran la actividad de los humanos, el comercio de especies salvajes, la contaminación y el cambio climático.
El responsable de ciencia y políticas de WWF, Mike Barrett, indicó que se ha llegado a un punto «en el que realmente no existe ninguna excusa para permitir que esto continúe».
«Sabemos cuáles son las causas y sabemos la magnitud del impacto que los humanos tienen sobre la naturaleza y sobre las poblaciones de vida salvaje, y ahora realmente depende de nosotros adoptar medidas», alertó.
El análisis, publicado cada dos años y cuyo propósito es proporcionar una estimación del estado actual de la vida salvaje, estudió 3.700 especies diferentes de aves, peces, mamíferos, anfibios y reptiles, aproximadamente el seis por ciento del número total de especies vertebradas que hay en el mundo.
El informe igualmente destaca el caso de los elefantes africanos, que han sufrido enorme descensos en su especie en los últimos años ante el incremento de la caza ilegal y subraya además la situación de los tiburones, amenazadas por el exceso de pesca.