La Flor del Espíritu Santo, registrada como la flor Nacional de Panamá, se halla en peligro de extinción, según algunos expertos. Aunque no se sabe con exactitud de dónde salió este nombre para la orquídea blanca, el genetista Gaspar Silvera dijo que existen crónicas que redactan que los españoles pasaron por Darién y les llamó la atención la flor cuando los indígenas se la mostraron y de allí aparentemente nació el nombre de Espíritu Santo.

Silvera añadió que las orquídeas son muy variadas, las cuales se pueden encontrar más en Las Minas (Herrera), Coclé y Panamá. Mientras, en Chiriquí y Veraguas, no es común verlas. La planta es terrestre y para conservarla debe estar en un lugar con mucha sombra y humedad. Si se siembra en estopa de coco, no debe tener tierra, más bien trozos de madera, abono orgánico y huecos para que sus raíces salgan.