Frida Kahlo, Cantinflas y Juan Gabriel no dejaron escapar la oportunidad de regresar al mundo de los vivos y se pasearon este domingo por el centro de Ciudad de México en el macrodesfile anual del Día de Muertos, que en los últimos años se ha reinventado como la festividad mexicana más universal. Desde la plaza del Zócalo, corazón de la capital mexicana, y a lo largo de nueve kilómetros, miles de personas disfrazadas de muertos desfilaron junto a enormes carrozas y figuras alegóricas cuando queda menos de una semana para que los mexicanos reciban en sus casas a sus seres queridos fallecidos.
«Vine al desfile para enseñar lo que es la cultura a mis hijos y que vean todo lo que son las tradiciones de nuestro país», contó a Efe Oscar, uno de los asistentes al desfile, satisfecho con todas las iniciativas que en los últimos años han modernizado el Día de Muertos.
El Día de Muertos, con sus calaveras, catrinas, coloridos alebrijes (criaturas alegóricas) y flores de cempasúchil, ya forma parte inseparable de la mexicanidad, junto con los tacos, el mariachi y la virgen de la Guadalupe.
EFE