Mientras ciudades como Buenos Aires, Madrid, Barcelona o Londres debaten sobre el impacto de los vehículos sin conductor (VTC) en el transporte y en el negocio de los taxis, Nueva York dio un paso al frente y se convirtió en la primera gran ciudad en limitar las licencias de compañías como Uber o Lyft. El ayuntamiento neoyorquino que dirige Bill de Blasio aprobó un proyecto de ley para limitar durante un año la emisión de nuevas licencias de VTC, periodo en el que estudiará el impacto de este servicio en el sistema de transportes urbano.
La medida, con exención para los vehículos que sean accesibles en silla de ruedas, salió adelante tras una votación del Concejo local y forma parte de un paquete regulatorio que incluye el establecimiento de un salario mínimo para los conductores de aplicaciones de VTC.
EFE