El personal del almacén de reciclaje recibe y clasifica las mercancías entrantes al momento de dejarlas, dejando a un lado las que pueden ser reparadas o restauradas. Luego, éstas son trasladadas a diversos talleres para ser renovadas y más tarde, vendidas, en una de las catorce tiendas del centro comercial.

Lo que no puede ser reutilizado se envía a centros de reciclaje específicos, según la naturaleza de sus elementos constitutivos. Hay puntos de venta especializados en muebles, ordenadores, móviles, electrodomésticos, equipos de audio, ropa, juguetes, bicicletas, herramientas de jardinería y materiales de construcción. Todo lo que se vende en estas tiendas es de segunda mano.

El centro ofrece un servicio de cafetería y tiene un restaurante de comidas de origen orgánico, una zona de exposiciones, instalaciones para conferencias y un centro de formación para aprender más acerca del reciclaje y de la Economía Circular.

También cuentan con su propio espacio para realizar compostaje. El compost se fabrica a partir de reciclar los restos de comida del restaurante y la cafetería y los transforma en abono, que se emplea para sus propias plantas o para vender.

El ReTuna Återbruksgalleria se encuentra en la ciudad de Eskilstuna, en Suecia, de ahí su nombre: “Tuna”, y está gestionado por la municipalidad, en colaboración con diversos expertos en reciclaje y reutilización. El gobierno local entiende que esta es la mejor forma de convertir los desperdicios en fuente de empleos verdes, al tiempo que concientiza a los ciudadanos y les ahorra dinero.

El Centro Comercial ReTuna Återbruksgalleria es una demostración de las enormes posibilidades que tiene la Economía Circular, una forma muy práctica de desbloquear el valor de lo que generalmente se desecha y un proyecto que debería ser el ejemplo a seguir a nivel mundial.