Google no es el primer gran grupo en lanzarse al “cloud gaming”, pero es sin duda el más esperado, porque su éxito o fracaso determinará el futuro cercano de un mercado balbuceante: el de los videojuegos liberados de limitaciones materiales.

Stadia, la plataforma para videojuegos en la “nube” (remota), estará disponible desde el martes en 14 países de América del Norte y Europa con un catálogo de 30 juegos.

¿Su promesa? Poder jugar en cualquier pantalla (computadora, TV conectada a Internet, o en el Pixel, el teléfono inteligente de Google) sin necesidad de una consola o un procesador con gráficos de última generación. En los “juegos en la nube”, la potencia informática, que garantiza la calidad de la imagen y la fluidez de la acción, está en los servidores.

Los jugadores solo necesitan una pantalla compatible y un controlador Stadia. Ya existen otras ofertas similares, como la PlayStation Now de Sony, que ha acumulado cerca de 700.000 suscriptores en 5 años. Pero la compañía japonesa solo ofrece parte de su catálogo en esta plataforma.

AFP