“Tenemos pacientes que valen entre 3 y 4 millones de euros”. A esta clínica equina del centro-este de Francia, llegan caballos de España y otros países vecinos para someterse a los tratamientos veterinarios más avanzados.  “Somos uno de los pocos centros de urgencias para caballos en Europa”, explica a la AFP el profesor Olivier Lepage, del centro Clinéquine, situado en Marcy-l’Etoile, cerca de Lyon. Otros establecimientos existen en Gante (Bélgica), Zúrich (Suiza) y Utrecht (Holanda). Cada año, “son hospitalizados unos 1.500 caballos” en esta clínica creada en 1998 como parte del campus del centro universitario Vetagro Sup, añade este cirujano de renombre internacional. Se recibe “una urgencia diaria” en un país que cuenta con más de un millón de caballos, y se trabaja las 24 horas del día.

El hospital dispone de una tecnología de última generación, con IRM, ecografía, escáner… si bien acucia una falta de expertos en imaginería y en enfermeros veterinarios, “sin embargo indispensables”, según Lepage. “En los últimos 25 años ha habido progresos formidables. Antes, se eutanasiaba a los caballos” heridos, asegura el cirujano, junto a un animal con la cadera fracturada. “Tenemos una medicina tan puntera como la humana”, asegura. Artrosis, enfermedades musculares, cirugía, medicina regenerativa, células madre… Veterinarios y médicos “tenemos muchas cosas que enseñarnos mutuamente”. “El caballo es un modelo muy interesante”.

AFP