En una playa paradisíaca con palmeras y cayucos, hay botellas de plástico, sandalias, neumáticos e incluso mascarillas, ahora que azota la pandemia. Pero allí también hay una mano que ofrece tirar todo eso a un cubo de reciclaje, para limpiarla y que los animales vuelvan a su hábitat natural.
En eso consiste el juego estilo tirachinas «Clean my beach» («Limpia mi playa»), creado por la empresa emergente senegalesa Kayfo Games Studio y que pone a los jugadores en el centro del problema de la contaminación playera, acercando de manera lúdica, a jóvenes y no tan jóvenes, una cuestión seria y relevante con la intención de concienciar.
«Es una temática que nos concierne a todos, sobre todo cuando vemos el estado de las playas aquí en Senegal, es algo que nos golpea cada vez que vamos a la playa, así que pensamos que sería un buen tema para abordar en un videojuego», explica a Efe el francés Julien Herbin, fundador de Kayfo Game Studio.
Kayfo es un estudio joven, creado en junio de 2019 en Dakar a fin de utilizar los videojuegos para sensibilizar, tratando temáticas africanas de una manera positiva y con el objetivo de que en este país de África occidental se imaginen, creen y desarrollen juegos electrónicos a la altura de los que se producen en el extranjero.
Su nombre procede del wolof, lengua local mayoritaria en Senegal, y significa «ven a jugar»; y los juegos que crean van dirigidos a teléfonos inteligentes y tabletas, porque son los aparatos más accesibles para los senegaleses.
Desde su creación ya han sacado tres juegos, uno de ellos (Da’karapid) de carreras con el «car rapide», el colorido e icónico autobús del transporte público en Senegal, como protagonista; otro de fútbol (Afro Juggle Challenge), debido a que es un fenómeno de masas en África; y el último de ellos, «Clean my beach».
«En general, el público del videojuego es más bien joven, pero no únicamente. Aquí en África la población es muy joven y vemos la oportunidad de sensibilizar en torno a las problemáticas y retos medioambientales», explica Herbin, al señalar que se trata de un juego que se puede compartir en familia.
En «Clean my beach», cuando se sube de nivel, van desbloqueándose nuevos animales que regresan a la playa, desde caracolas, erizos y estrellas de mar a gaviotas, tortugas, delfines y ballenas, entre muchos otros.
Otro aspecto del juego, disponible tanto para Android como para iOS, es que los objetos recogidos en la playa se pueden reciclar en una máquina y convertirse en uno nuevo, dándole a los desechos una segunda vida.
«En Senegal, la gente tira los desechos por todos sitios, en las playas, en la calle; nos dijimos que había que hacer algo, abrir los ojos a la gente, despertar la conciencia colectiva», comenta a Efe Binta Dème (29 años), la única mujer del equipo y única diseñadora de videojuegos en Senegal, que entró en el equipo de Kayfo con la motivación de crear juegos en los que verse reflejada.
Fuente: EFE