El respeto a la dignidad humana exige un cambio social y abre camino para el diálogo

“El que quiere ser el más importante entre ustedes, que se haga el servidor de todos, y el que quiere ser el primero, se haga siervo de todos. Así como yo no he venido para que me sirvan sino para servir y dar mi vida por todos” (Mc 10,43-45).

Hermanos y hermanas:

Reiteramos, como Iglesia nos sentimos profundamente preocupados por la situación social, económica y política del país. No somos ajenos al dolor de las comunidades donde convivimos, particularmente somos testigos de su permanente empobrecimiento producto de las alzas de la canasta de alimentos, combustibles, medicamentos en medio de la incertidumbre por la pérdida de miles de empleos y el aumento de la informalidad del trabajo. (Comunicado de la CEP, 8 de julio de 2022).

Comprendemos que no resulta fácil hablar de diálogo en un momento de tensión y de ánimos caldeados como lo que estamos viviendo, sin embargo, el diálogo honesto, transparente y coherente es la única vía que abre camino para buscar, mediante la negociación y la toma de decisiones adecuadas, la solución a los conflictos. Su condición es la voluntad política de todos los actores, la capacidad de escucha para ver el punto de vista del otro, y sobre todo el respeto, siendo su motor la conciencia de que todos tenemos los mismos derechos y responsabilidades sin excluir a nadie y que ningún grupo tiene más derecho que otros para la búsqueda de su propio bienestar y del bien común.

En este momento histórico exhortamos al Gobierno y a todos los actores sociales a buscar nuevos cauces de reconocimiento de los derechos humanos de todos, que nos permitan transformar nuestras instituciones; buscar mejores prácticas políticas y económicas, y caminar urgentemente hacia un desarrollo humano, integral, solidario, equitativo y sostenible, superando la raíz fundamental de todos los problemas, que es la mezcla de una injusta inequidad con la exclusión social de las mayorías populares y el cáncer social de la corrupción a todos los niveles (Papa Francisco, La alegría del Evangelio 60).

Pidamos al Señor que nos haga comprender que el diálogo no es una discusión ni un debate de ideas, sino una búsqueda de la verdad entre todos.

Panamá, 13 de julio de 2022.

Comité Permanente de la CEP

Fuente: Conferencia Episcopal Panameña (CEP)