Facebook ha anunciado nuevas medidas para evitar la proliferación de contenidos que induzcan a la violencia y al odio, como ocurrió con el vídeo del atentado de Nueva Zelanda, entre ellas la de bloquear la opción de emitir videos en directo a usuarios que compartan publicaciones de este tipo. La intención de la tecnológica es bloquear el acceso a la herramienta “Facebook Live” durante 30 días, aproximadamente, a cualquier usuario que haya compartido un post que vaya en contra de su política comunitaria, por ejemplo una referencia sin contexto a un enlace de una declaración de un grupo terrorista.

Para ello, la compañía de Mark Zuckerberg destinará una partida de $7,5 millones en tecnología de análisis de imagen y audio, según ha avanzado en un comunicado. Asimismo, planea trasladar el nuevo modelo de restricción a “otras áreas” en las siguientes semanas.

EFE