El Zoológico de Johannesburgo, Sudáfrica, decidió acabar con la vida de Wang, el último oso polar en África, luego de haberse desmejorado su salud tras la pérdida de su compañera de años, hace unos meses. 

Wang murió lejos de su hábitat natural, el Ártico, sufriendo artritis crónica e insuficiencia hepática. De acuerdo al portal del recinto, el veterinario en jefe “tuvo que tomar una decisión muy difícil” y reiteró que mantendrán su política de no reemplazar a los osos. 

Wang fue diagnosticado con dolencias hepáticas y otras condiciones médicas en noviembre del 2010 y desde entonces había recibido tratamientos adecuados para su condición. GeeBee, la pareja del animal, falleció el 12 de enero del 2014 de causas naturales. 

El último oso polar en África fue llevado a ese continente en 1986, un año después de su nacimiento, el 21 de diciembre de 1985, como parte de un programa de intercambio con el zoológico de Japón. 

El zoológico sudafricano rendirá tributo a Wang dedicándole su evento caminata, el “Zoo Trot”, del 14 de septiembre próximo.  @crisolfm