Los cocodrilos son una atracción turística en Costa Rica por su gran tamaño y facilidad para observarlos; no obstante, los expertos solicitan respetar su hábitat para evitar ataques.
Ver a una persona darle de comer a los cocodrilos, es una actividad común entre los extranjeros que visitan el país centroamericano y un motivo de preocupación para la Comisión para la Conservación de Cocodrilos, que asegura los humanos están invadiendo el espacio del animal. Desde el año 1990, en Costa Rica se establecieron empresas turísticas en el río Tárcoles, donde se inició con la costumbre de alimentar a los cocodrilos como un espectáculo para los visitantes.
Según los expertos, esa atracción turística provoca que los cocodrilos cambien su comportamiento y se acostumbren a relacionar la presencia de humanos con comida, por lo que cada vez que un animal de estos ve a una persona se acerca en busca de alimento.
‘Los cocodrilos presentan un comportamiento agresivo por naturaleza y atacan para defender su territorio. La realidad es que son las personas quienes han invadido su territorio’, indica el investigador Iván Sandoval.
‘El cocodrilo es un animal peligroso y nunca dejará de serlo, aún cuando muchas veces haya estado cerca de una persona que le brinda comida como parte del espectáculo. La población debe entender que un cocodrilo no puede estar domesticado, son depredadores’, añade a EFE Juan Rafael Bolaños, miembro de la Comisión para la Conservación de Cocodrilos. @crisolfm
