Los animales en estado salvaje se están muriendo a un ritmo tan grande como el de la extinción que acabó con los dinosaurios hace 65 millones de años, a causa de la actividad humana y el cambio climático.

Las tasas de extinción actuales son al menos 12 veces más rápidas de lo normal, porque la gente los mata para alimentarse, por dinero o destruyen su hábitat, expresó Anthony Barnosky, profesor de biología en la Universidad de California en Berkeley.

“Si ese ritmo continúa sin cambios, la sexta extinción en masa de la Tierra es una certeza”, dijo Barnosky en una entrevista telefónica. “Dentro de unos 200 a 300 años, tres de cada cuatro especies con las que estamos familiarizados, dejarían de existir”.

Los resultados suman presión a los enviados de unos 190 países que se reúnen esta semana en una conferencia de las Naciones Unidas en Perú para discutir límites a los gases de efecto invernadero responsables del calentamiento global.

“Podríamos hacer tanto daño en 400 años como el que el asteroide hizo a los dinosaurios”, aseguró en una entrevista Sean Carroll, un biólogo que dirige el Departamento de Educación Científica en el Instituto Médico Howard en Bethesda, Maryland, Estados Unidos.