La canciller alemana Angela Merkel desiste de ir al evento operístico, luego dell fiasco de la última edición bajo la dirección de la bisnieta de Richard Wagner.

Los nubarrones se acumulan en el cielo del Festival de ópera de Bayreuth, que se inaugura hoy en ausencia de Angela Merkel por primera vez en 10 años, tras una abucheada edición 2013 que conmemoró el bicentenario de Richard Wagner.

Desde su llegada al poder en 2005, la jefa del Gobierno alemán no se había perdido ninguna inauguración de este acontecimiento musical organizado cada verano en Baviera, dedicado exclusivamente a la obra de Wagner. Pero este año la canciller invocó un “problema de agenda”. Bayreuth era una de las raras ocasiones en que Merkel dejaba de lado su habitual traje pantalón para ponerse un vestido largo.

Entre los festivaleros se murmura que el motivo de su deserción es en realidad la puesta en escena del alemán Sebastian Baumgarten prevista para el Tannhäuser, que generó una opinión unánime en contra. Desde 2009, el teatro Festspielhaus, creado por el propio Wagner, pasó a las manos de dos bisnietas, en especial Katharina, cuya selección de directores para las producciones no gustan al público. @crisolfm