El administrador de la NASA, Jim Bridenstine, afirmó que el regreso a la Luna forma parte de un plan “sostenible” que convertirá este satélite en una base de “pruebas” para un ambicioso proyecto: organizar la primera misión tripulada a Marte y descubrir vida en otros planetas.
Bridenstine desveló con palabras de entusiasmo en una conferencia en el centro Espacial Kennedy los planes de la agencia espacial estadounidense, impulsados gracias, dijo, a la propuesta presupuestaria de la Casa Blanca, que cuenta con el respaldo bipartidista en el Congreso.

Esta próxima primera misión a la Luna quiere ser, por primera vez, “sostenible”, es decir, que la presencia humana en su superficie sea duradera y “podamos conocer todas sus partes”, dijo Bridenstein junto a un cartel donde se leía: “Explorar de la Luna a Marte. La Luna ilumina el camino”. Para ello, la NASA se ha embarcado en la construcción de la base espacial “Gateway”, que orbitará con energía solar de “gran eficiencia” alrededor de la Luna y contará con la contribución de otras agencias espaciales y empresas privadas.

EFE