El retroceso del agua en uno de los principales embalses de la vasta cuenca del río Colorado está generando temores sobre el futuro de la región de 40 millones de habitantes y 1.6 millones de hectáreas de cultivos.

El agua en el lago Mead ha caído a sus niveles históricos más bajos luego de 14 años de sequía.

A cientos de kilómetros los agricultores que dependen del agua de la represa Hoover se preparan para lo peor. Los operadores de puertos deportivos, administradores de aguas y agricultores vigilan el nivel del agua del embalse.  @crisolfm