Las chinches, algunas de las compañeras de cama humanas más indeseadas, han sido compañeras parasitarias de especies ancestrales, caminando sobre la tierra al mismo tiempo que los dinosaurios. El trabajo de un equipo internacional de científicos, incluida la Universidad de Sheffield, en Reino Unido, comparó el ADN de docenas de especies de chinches para comprender las relaciones evolutivas dentro del grupo y su relación con los humanos.

El equipo descubrió que las chinches son más viejas que los murciélagos, un mamífero que la gente creía que era su primer huésped hace entre 50 y 60 millones de años. Las chinches, de hecho, evolucionaron alrededor de 50 millones de años antes. Así, los expertos han descubierto que la historia evolutiva de las chinches es mucho más compleja de lo que se pensaba y las criaturas en realidad existían durante la época de los dinosaurios. Se necesita más investigación para averiguar quién era su anfitrión en ese momento, aunque la comprensión actual sugiere que es poco probable que se alimentaran de la sangre de los dinosaurios.

ECOticias