El volcán Barú es la parte más alta del país, con una elevación de 3,000 metros sobre el nivel del mar y se ha convertido en la fuente principal de piedras volcánicas, las cuales se transforman en arte y toman un valor económico importante.

Desde épocas remotas se emplea esta piedra en importantes edificaciones, como anfiteatros, fortificaciones, puentes, torres y para elaborar importantes piezas de arte.

En la actualidad en el corregimiento de Volcán, distrito de Bugaba, Otilio Valdés se dedica desde hace más de 20 años a trabajar la piedra volcánica y transformarla en figuras que se convierten en verdaderas obras de arte que son buscadas por nacionales y extranjeros para colocarlas en los jardines de sus casas o en las fincas.

Otilio señaló que sus herramientas principales son el cincel, el martillo y la piedra caliza o volcánica, las cuales logra conseguir en las faldas del volcán Barú o en fincas próximas al sitio.

Al referirse a los costos de sus piezas, van desde 40 dólares hasta 700 dólares, ya que van por diseño y tamaño.

El escultor chiricano aseguró que la demanda por el producto va en crecimiento, ya que a muchos nacionales y extranjeros les gusta esta clase de trabajo.