La tormenta de nieve anunciada como la peor de la historia en Nueva York pasó finalmente por la ciudad sin mayores consecuencias, aunque descargó su furia más al noreste de Estados Unidos, en la región de Boston.

Millones de habitantes permanecieron en sus hogares por esta tormenta invernal bautizada “Juno”, que paralizó de manera inédita la Gran Manzana desde el lunes por la tarde hasta el martes a la mañana por las severas, y criticadas por algunos, medidas de prevención.