Dos avalanchas en distintas zonas de los Alpes suizos se cobraron dos vidas, a pesar de los esfuerzos de los servicios de socorro, en eventos en los que otras cuatro personas resultaron heridas, aunque sus vidas no corren peligro.
Una avalancha en el área de Lauenen (cantón de Berna) arrastró el sábado a dos alpinistas, de los cuales uno murió ayer en el hospital al que había sido trasladado en helicóptero. La policía aún no ha podido determinar formalmente su identidad.
El otro alpinista pudo salir de la nieve solo y fue el que alertó a los socorristas, indicó la Policía del cantón de Berna.
Ambas efectuaban un trayecto en esquí de travesía en la zona de Wildhorn, en el área montañosa más elevada de esa zona de los Alpes, pero la avalancha los sorprendió.
Una segunda avalancha en el cantón de Valais arrastró a cuatro excursionistas. Uno de ellos, de nacionalidad suiza, no sobrevivió a las heridas que sufrió.
Gran parte de Europa se ha visto seriamente afectada con temperaturas récord debido a la tormenta denominada «La Bestia del Este».
El fenómeno proveniente del Ártico, trajo consigo una inusual tormenta de nieve a Roma, paralizando la ciudad y ofreciendo a los habitantes la rara oportunidad de esquiar, deslizarse en trineos y hacer muñecos de nieve en sus famosos parques y plazas.
Los servicios de tren, avión y autobús de Roma quedaron paralizados y la agencia de protección civil incluso movilizó al ejército para ayudar a limpiar las calles cubiertas de aguanieve, ya que la ciudad acostumbrada a los inviernos suaves estaba cubierta de gruesa capa de nieve.
En otro lugar, la tormenta causó temperaturas peligrosamente bajas: los meteorólogos en Alemania informaron un mínimo histórico de -27 grados Centígrados (-16.6 Fahrenheit) en la montaña Zugspitze en los Alpes.