Vilna (AFP) –

 

El primer ministro lituano Saulius Skvernelis declaró el martes que si gana la elección presidencial en mayo, contempla mudar la embajada de su país en Israel de Tel-Aviv a Jerusalén, un asunto crucial del conflicto israelo-palestino.

El jefe de gobierno estimó que este traslado favorecería las relaciones con Israel y Estados Unidos, algo que Lituania considera como una garantía para su seguridad frente a Rusia, su país vecino.

No obstante, en cualquier caso una eventual mudanza de la embajada tendría que ser decidida por el gobierno y no por el jefe de Estado.

Este traslado ‘podría dar un nuevo impulso a las relaciones con Israel, tanto en el campo de la seguridad como del comercio’, dijo a periodistas Skvernelis que empezó ya su campaña presidencial.

‘También enviamos el mensaje que Estados Unidos es nuestro socio no solamente de palabra sino que nosotros también tomamos parte en asuntos más difíciles’, agregó.

La decisión del presidente Donald Trump de desplazar la embajada de Estados Unidos a Jerusalén rompió un consenso internacional de décadas que buscaba que el estatus de la ciudad fuera solucionado en el marco de un acuerdo de paz entre Israel y palestinos. Líderes políticos checos y rumanos también anunciaron que estaban contemplando transferir su embajada a Jerusalén, pero hasta ahora no se tomado ninguna decisión.

Entre los países de América Latina que siguieron los pasos de Washington figuran Guatemala, Paraguay que luego con el cambio de gobierno se retractó. Honduras y Brasil ratificaron a principios de este año sus intenciones de transferir sus embajadas a Jerusalén pero sin hacer más precisiones sobre la fecha.