El mandatario de EE.UU anunció aquel sábado previo a la Semana Santa que habría “mucha muerte” de forma inminente y acotó que sería “probablemente la semana más dura” de la epidemia de coronavirus y así fue. Pero también para el resto de América.
Estados Unidos, el país con el triple que ningún otro del mundo, más de 550.000, y más muertos en el mundo, con cerca de 22.000, pone en el continente americano cifras que aterrorizan, especialmente por la situación en el estado de Nueva York.
Nueva York, que registra ya un total de 9.385 muertes a consecuencia del coronavirus, se acerca con paso firme a los 10.000 fallecimientos al prolongarse una jornada más la tasa de mortalidad de más de 700 víctimas al día que ha venido registrando toda la semana.
Según anunció el gobernador Andrew Cuomo, el sábado perdieron la vida otras 758 personas a causa de la pandemia, una cifra que describió como “trágica”.
Mientras, en la Florida los casos confirmados del COVID-19 aumentaron a 19.895 y las muertes a 461, según el primer boletín diario del Departamento de Salud del estado, que el sábado por la tarde había contabilizado 18.896 casos y 446 muertes.
Brasil, un lugar de riesgo en América
El país con más contagios después de Estados Unidos sigue siendo Canadá, con unos 24.000, y más de 700 muertes.
Le sigue Brasil, donde el presidente, Jair Bolsonaro, ha continuado con los desplantes a las medidas de aislamiento ante el coronavirus, pese a que el número de muertos llegó a 1.223, con 22.169 casos confirmados.
Los nuevos datos suponen que, en las últimas 24 horas, en el gigante suramericano se registraron 99 nuevos fallecimientos y se confirmaron otros 1.442 contagios.
La situación más delicada continúa en el estado de Sao Paulo, en el que, con 44 millones de habitantes, reside cerca del 40 % de la población del país y donde hay hasta ahora 588 muertes y 8.755 casos.
Ecuador, otro de los países más afectados en América, suma ya 333 muertes, 7.466 casos positivos y 505 que salieron de la atención hospitalaria
En Chile, el presidente Sebastián Piñera informó que en las últimas 24 horas se registraron 286 nuevos casos, lo que eleva la cifra total hasta 7.213 y una nueva cifra de 80 fallecidos, y reconoció las dificultades para comprar respiradores mecánicos dada la “guerra mundial” por estos artículos.
En el Caribe, Cuba alcanzó los 669 positivos de coronavirus tras el diagnóstico de 49 nuevos casos, mientras se registraron dos personas fallecidas en La Habana para un total de 18 decesos por COVID-19, mientras que Costa Rica cerró la Semana Santa con un total de 595 casos positivos de coronavirus COVID-19, para 18 casos más en un día, y se registran 56 personas recuperadas
China sigue con casos de importados de coronavirus
Los contagios provenientes del extranjero, los llamados casos “importados”, continúan aumentando en China y supusieron 98 de las 108 nuevas infecciones detectadas este domingo en el país asiático, un nuevo máximo desde marzo, informó la Comisión Nacional de Sanidad.
Esta cifra supone un aumento respecto a los 97 “importados” (99 totales) del día anterior, que a su vez había más que duplicado los 46 nuevos infectados totales por el coronavirus SARS-CoV-2 que las autoridades sanitarias comunicaron el pasado sábado en su parte diario.
La fuente detalló que, hasta la pasada medianoche local (16.00 hora GMT del domingo), se habían certificado también dos muertes por la resultante neumonía COVID-19, las dos en la cuna de la pandemia, la ciudad centro-oriental china de Wuhan, que ya acumula al menos 2.579 decesos desde el inicio del brote.
En cuanto a los 10 contagios “locales”, tres se produjeron en la provincia suroriental de Cantón, mientras que los 7 restantes se localizaron en la de Heilongjiang, fronteriza con Rusia y nuevo foco de contagio en China.
Italia respira
Italia tuvo ayer un respiro. Los fallecidos por el coronavirus siguen siendo muchos y han alcanzado los 19.899, pero se registraron 431 muertos en las últimas 24 horas, el dato más bajo de las últimas tres semanas, según informó el jefe de Protección Civil, Angelo Borrelli, en su boletín diario.
Era desde el 19 de marzo, cuando se registraron 427 fallecidos, que el número de muertos no había sido tan bajo.
Además, el número total de contagios se situó en las 156.363 personas, lo que supone un aumento de 4.092 contagiados más en las últimas veinticuatro horas y con una ligera disminución respecto a los 4.694 de este sábado.
El número de personas actualmente positivas en test de coronavirus en Italia es de 102.253, con un aumento de 1.984 respecto al sábado; de ellas, 71.063 están aisladas en sus casas con síntomas leves, 27.847 ingresadas en los hospitales, y de estas, 3.343 en cuidados intensivos.
“La tendencia (a la baja) es ya segura. Si se suma la reducción de los ingresados, de los pacientes en cuidados intensivos y de los fallecidos, podemos decir que las medidas adoptadas y prolongadas están teniendo un impacto sobre este virus”, explicó en la rueda de prensa diaria el responsable de neumología del hospital Gemelli de Roma, Luca Richeldi.
Gran Bretaña supera las 10.600 muertes y Johnson dado de alta
Las muertes registradas en hospitales del Reino Unido por COVID-19 superan ya las 10.600, tras sumar 737 en 24 horas, en lo que el ministro de Sanidad, Matt Hancock, calificó de “día sombrío”.
Esta cifra es algo inferior a los 917 fallecimientos confirmados el sábado y al récord de 980 anunciado el viernes, que fue la mayor cantidad registrada en un día en un país europeo, a pesar de que no incluye las defunciones fuera de los centros sanitarios.
Este anuncio coincidió ayer con la salida del hospital St. Thomas de Londres del primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, tras ser tratado por COVID-19, pero seguirá convaleciente en casa.
En un vídeo difundido en twitter tras recibir el alta, Johnson agradeció personalmente a los profesionales del Servicio nacional de salud, NHS, que le hayan “salvado la vida” e instó a los ciudadanos a quedarse en sus domicilios para evitar la propagación del virus y proteger la Sanidad pública.
Paradójicamente, Johnson, que reconoce en su mensaje que estuvo cerca de morir, ha sido criticado por su lentitud inicial a la hora de aplicar esas restricciones en pro de una hipotética inmunización colectiva por contagio, una teoría científica que el Gobierno asegura que no formó parte de su política oficial.
Un portavoz del jefe del Ejecutivo ha indicado que, por recomendación médica, este “no se reincorporará inmediatamente al trabajo”, sino que continuará su recuperación en la residencia oficial campestre de Chequers, al oeste de Londres.
Su prometida, Carrie Symonds, de 32 años y embarazada del primer hijo de ambos, alabó también en twitter la labor del personal sanitario y confesó que la pasada semana hubo momentos “muy oscuros”.
Johnson, de 55 años, y padres de otros cuatro hijos con su anterior esposa, ingresó el pasado 5 de abril en el hospital y pasó tres noches en cuidados intensivos antes de ser dado de alta hoy.
Fuente: EFE