Nueva York EFE
Las protestas antirracistas del movimiento «Black Lives Matter» (Las vidas negras importan) siguen produciéndose en Nueva York prácticamente un mes después de su comienzo, desencadenado por la muerte del afroamericano George Floyd a manos de un policía blanco en Mineápolis, con marchas diarias pacíficas e incluso con una acampada frente a la Alcaldía.
Lejos de los disturbios y los saqueos de los primeros días, que llevaron al alcalde Bill de Blasio a ordenar un toque de queda histórico y dejaron centenares de detenidos, lo que menguó la popularidad del político demócrata, las protestas de estos últimos días han sido pacíficas y más reducidas, también teniendo en cuenta el avance de la reapertura económica.
El pasado viernes, no obstante, las protestas fueron multitudinarias porque conmemoraban el fin de la esclavitud en EE.UU. en la fecha del 19 de junio de 1865, una efeméride bautizada como «Juneteenth», que sacó a las calles a miles de personas en la Gran Manzana en otras grandes ciudades de EE.UU.