Los agentes sanitarios que combaten el dengue en la mayor ciudad brasileña podrán entrar a la fuerza a las casas de personas que les nieguen el ingreso o en las que nadie responda, según una ley sancionada por el alcalde de Sao Paulo, Fernando Haddad.
La ley autoriza «la entrada forzada a inmuebles particulares en los casos de rechazo o ausencia de alguien que pueda abrirle la puerta al agente sanitario y cuando el procedimiento se muestre fundamental para la contención de la enfermedad», según la ley aprobada el mes pasado por el Concejo municipal.
Pese a que la ley todavía tiene que ser reglamentada y todos los procedimientos previos a la entrada forzada definidos, la iniciativa da poder al agente sanitario a ingresar a un inmueble particular si considera que el mismo tiene que ser fumigado por haberse convertido en un criadero del mosquito que transmite el dengue o la chikungunya.
La norma fue incluida entre las nuevas estrategias para enfrentar una enfermedad que el año pasado alcanzó niveles epidémicos en la mayor ciudad de Brasil y que en la época obligó a la alcaldía a solicitar ayuda al Ejército en sus tareas de combate al mosquito aedes aegypti.
Los agentes sanitarios hicieron las respectivas fumigaciones acompañados por soldados del Ejército en una estrategia para incrementar la confianza de los habitantes de la ciudad, muchos de los cuales únicamente abrían sus puertas cuando percibían que los fumigadores estaban acompañados por militares.