Madrid (EFE).- El último fin de semana de julio estará dominado por el calor en el sur peninsular, donde los termómetros alcanzarán valores por encima de los 40 grados, mientras que en el norte la presencia de frentes atlánticos dejará alguna lluvia y temperaturas más contenidas, entre 20-25 grados.
Se espera un sábado y domingo, en general, estables y “típicos de esta época del año con sol y calor”, aunque en Galicia y en las comunidades Cantábricas habrá lluvias débiles y en zonas de montaña del norte y este de la península se prevén tormentas, ha avanzado Rubén Del Campo, portavoz de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).