Las mujeres que toman antidepresivos durante el embarazo podrían presentar un mayor peligro de tener hijos con autismo , se señaló en un estudio publicado por la revista estadounidense JAMA Pediatrics .
«Las diversas causas del autismo siguen siendo poco claras, pero estudios han demostrado que tanto la genética como el medio ambiente desempeñan un papel» en la presencia de la enfermedad, expresó la profesora Anick Berard de la Universidad de Montreal, quien encabezó el estudio canadiense de alrededor de 150 mil embarazos.
De acuerdo con Berard, tomar antidepresivos durante el segundo o tercer trimestres del embarazo aumenta casi al doble el riesgo de que un niño reciba el diagnóstico de autismo para los siete años de edad, sobre todo si la madre toma inhibidores selectivos de la recaptación de serótino o SSRI, por sus siglas en inglés.
Berard y sus colegas utilizaron los datos de todos los embarazos y los niños de Quebec, la mayor provincia de Canadá, entre enero de 1998 y diciembre de 2009. De los 145.456 hijos únicos nacidos vivos y llegados a término, mil 54 fueron diagnosticados con autismo en promedio a los cuatro años y medio de edad.
Los niños fueron seguidos durante un promedio de 6.2 años. Los investigadores identificaron a 4 mil 724 infantes expuestos a antidepresivos en el útero. Un total de 2 mil 200 niños fueron expuestos durante el primer trimestre y 2 mil 532 fueron expuestos durante el segundo y tercer trimestres, un periodo crítico para el desarrollo cerebral del feto.
Un total de 32 niños expuestos a antidepresivos durante el segundo y tercer trimestres fueron diagnosticados con autismo, al igual que 40 niños expuestos durante el primer trimestre, se señaló en los resultados.
Luego de efectuar ajustes por posibles elementos como la genética y la edad de la madre, el uso de antidepresivos durante el segundo o tercer trimestres se asoció con un aumento de 87% en el autismo.