La leishmaniasis es una enfermedad parasitaria que cada año presenta una gran cantidad de casos en el país, hasta 6 mil, de los índices más altos en Centro América.
Hay tres formas de esta enfermedad, transmitida por la picadura de una chitra, pero en Panamá la gran mayoría de pacientes presentan la de tipo cutánea.
‘Esencialmente, donde te pica la chitra se forma una úlcera que no sana’, explica el Dr. Néstor Sosa, director del Instituto Conmemorativo Gorgas de Estudios de la Salud (ICGES), en donde históricamente se ha estudiado esta enfermedad. Este mes concluye la primera fase de un estudio que realiza el ICGES en conjunto con el Instituto Militar de Investigaciones Walter Reed de Estados Unidos, que contó con cerca de 400 pacientes y que busca evaluar la eficacia de una crema como tratamiento para la enfermedad.
‘Tras darle seguimiento al último paciente, vamos a analizar la data’, indica el investigador, agregando que los resultados se tendrán a mediados de este año. ‘Si observamos un alto índice de cura, muy probablemente tendremos la aprobación de la FDA y el medicamento se podrá mercadear’.
Actualmente el tratamiento que existe para la leishmaniasis no es fácil de administrar y tiene efectos adversos. ‘Requiere de unas inyecciones por más de 20 días’, señala el médico. ‘Además, produce dolores corporales y puede afectar el hígado, el corazón, el páncreas’.
Es decir que si los resultados indican que la crema es igual de efectiva o mejor que las inyecciones, tendría la ventaja adicional de que no presenta efectos adversos y es más fácil de administrar.