• Indicador muestra que los ríos vuelven a su equilibrio.

Un proceso que llevará al menos sesenta días, para lograr la desinfección de la red hídrica que abastece de agua potable a las familias en las provincias de Los Santos y Herrera, anunció este martes, 8 de julio, el director del Instituto de Acueductos y Alcantarillados Nacionales de Panamá, (IDAAN), Rutilio Villarreal.

El Gobierno del presidente de Panamá, José Raúl Mulino, priorizó atender la situación que afecta a miles de familias de la región por la contaminación del río La Villa y sus afluentes, lo cual obligó a suspender la operación de las plantas potabilizadoras; la situación ha sido controlada y se da paso al proceso de desinfección de la red de tuberías.

“El río vuelve a su equilibrio, esto es normal, y empezaremos con el proceso de limpieza de las redes, tanques e infraestructuras. Lo vamos a dividir en etapas, la primera es la instalación de una serie de válvulas para sectorizar hidráulicamente las redes de la ciudad de Chitré, la red de la vía de Los Santos o Guararé”, explicó el director.

El proceso, consiste en ir desinfectando la red a través de válvulas que aíslen por sectores y habilitar la distribución del agua a los hogares, con el fin de reducir los efectos y no dejar sin el líquido durante el periodo que tome la adecuación. Este proceso de mejora conlleva, además, la priorización, a través del Plan de Emergencia, del proyecto de modernización y readecuación de la Planta Potabilizadora Rufina Alfaro, así como mejorar el sistema de bombeo en la toma de agua.

Por otro lado, Villarreal, reveló los costos para atender la crisis, con una inversión, en Los Santos, de B/.14.6 millones, en tanto que, en Herrera, B/.4.3 millones, y B/.583 mil en desinfección, totalizando unos B/.19 millones entre ambas provincias.

En lo referente a las condiciones del agua en el río, en los últimos siete días, han ido mejorando al realizar las pruebas, tanto en agua cruda como en la tratada, lo cual es indicativo de mejoría en la presencia de materia orgánica en los afluentes; no obstante, se mantienen los controles hasta alcanzar los niveles normales.