Las muertes por COVID-19 en el mundo han superado las 200.000, una barrera que prácticamente nadie imaginaba hace dos meses, cuando el virus acababa de detectarse en Europa y surgió el segundo foco mundial de la infección después de China, para luego saltar a Estados Unidos, que es su epicentro actual.
Los decesos ascienden exactamente a 202.597, según la última actualización de los datos que maneja la Organización Mundial de la Salud (OMS).
A esa cifra se ha llegado tras un aumento de 5.040 casos en la última jornada.
De otro lado, los casos globales de coronavirus totalizan en estos momentos los 2,95 millones, tras un aumento de 73.278 casos en las últimas 24 horas.
La tendencia tanto de muertes como de casos confirmados a nivel mundial continúa ralentizándose.
Fuente: EFE