El gobierno de la República de Panamá, a través del Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) efectuó hace poco, la séptima Subasta de Letras del Tesoro del año 2025 y, conjuntamente, la tercera compensación de Intereses Preferenciales Hipotecarios. La subasta recibió una fuerte demanda del mercado, alcanzando ofertas por USD 437.55 millones, frente a una convocatoria inicial de USD 50 millones.

Primera Vuelta de la Subasta

Se realizó la Subasta de Letras del Tesoro correspondiente al mes de agosto, mediante el Programa de Creadores de Mercado y a través de la Bolsa Latinoamericana de Valores (LATINEX); la cual había sido anunciada por un monto indicativo no vinculante de USD50 millones y vencimiento en agosto de 2026. En la Primera Vuelta, se recibieron 55 Ofertas Competitivas por USD209.61 millones y 26 Ofertas No Competitivas por USD227.94 millones; casi 8.8 veces el monto indicativo. El MEF decidió adjudicar Ofertas Competitivas por USD86.0 millones y Ofertas No Competitivas por USD227.94 millones; a un Precio Promedio Ponderado de 94.86% y un Rendimiento Promedio Ponderado de 5.36%; rendimiento que es 29 puntos básicos (bps) menor al logrado en la Subasta de Letras de julio.

Segunda Vuelta de la Subasta (Opción de Compra – greenshoe)

Luego, los 3 participantes con categoría de Creadores de Mercado ejercieron su derecho de adquirir hasta un 25% adicional del monto que se les había adjudicado en Primera Vuelta, al Precio Promedio Ponderado.  Así, se adjudicaron USD33.1 millones adicionales.

Compensación de Intereses Preferenciales Hipotecarios

Posteriormente, con el apoyo del Puesto de Bolsa del Banco Nacional de Panamá, se colocaron Letras del Tesoro por USD40 millones, distribuidos entre los bancos que financian hogares a través de Intereses Preferenciales Hipotecarios. Estas Letras del Tesoro son de la misma serie que las subastadas, por lo que los bancos contarán con instrumentos líquidos que se negocian activamente en el mercado de capitales local.

Estos resultados reflejan la confianza de los inversionistas en la solidez de la economía panameña y en la disciplina fiscal del Gobierno. Asimismo, se suman al buen desempeño fiscal registrado en junio, que confirma que Panamá avanza en línea con la meta de déficit fiscal de 4% del PIB establecida en la Ley de Responsabilidad Social Fiscal, asegurando un 2025 de mayor orden y sostenibilidad en las finanzas públicas.