Ulán Bator (AFP) |
Los habitantes de Mongolia elegirán el miércoles a sus diputados en unas elecciones marcadas por la epidemia del nuevo coronavirus.
Este país de tres millones de habitantes, situado entre Rusia y China, tomó medidas muy severas para evitar la propagación del virus y fue uno de los primeros países en cerrar sus fronteras tras la aparición de los primeros casos en China.
Unos 2.000 oficinas de votación se instalaron para los comicios de este antiguo satélite de la URSS, que adoptó en 1992 una Constitución democrática.
En total, se presentan 600 candidatos para los 76 escaños de este parlamento unicameral. Los principales movimientos políticos son el Partido del Pueblo Mongol (PPM), de centro-izquierda, fundado por los excomunistas, que está en el poder, y el Partido Demócrata (PD), liberal y conservador.
Los mítines políticos debían respetar, por seguridad, la regla de no reunir a más de 30 personas en el mismo sitio, pero en muchos casos se han incumplido las normas y también ha habido campaña puerta por puerta para captar votos.
El PPM parece favorito en estas elecciones, donde los votantes están más preocupados por el virus que por el desempleo o la pobreza, según los analistas.
La pregunta es cuántos electores podrán votar ya que las normas de seguridad debido a la pandemia prohíben que los habitantes abandonen la región en la que residen.
Mongolia tiene hasta el momento 200 enfermos de coronavirus, la mayoría importados de Rusia, y no ha registrado ningún fallecido.