La ONU ha enviado un contingente de cascos azules a la comarca de Aburoc, en el norte del país, para permitir el envío de ayuda humanitaria urgente a decenas de miles de personas que han huido de los choques entre fuerzas rebeldes y gubernamentales.

‘El objetivo es proporcionar a las organizaciones humanitarias la confianza que necesitan para reanudar urgentemente la ayuda a decenas de miles de personas en Aburoc, que han huido de la violencia’, dijo el jefe de la misión de la ONU para Sudán del Sur (UNMISS), David Shearer, en un comunicado difundido hoy en Yuba.

Según Shearer, el envío de estas fuerzas, cuyo número no ha sido anunciado, pretende ofrecer una respuesta humanitaria inmediata y un ‘leve sello de mantenimiento de paz en el área’. UNMISS calcula que cerca de 50 mil personas han buscado refugio dentro y en los alrededores de Aburoc, situada en la provincia septentrional del Alto Nilo, como consecuencia de los combates. Esta comarca está controlada por los milicianos opositores del Movimiento de Liberación Popular de Sudán (SPLM, en inglés), y ha sido objetivo de una ofensiva militar por parte de las fuerzas armadas leales al presidente Sava Kiir. ‘Sin un suministro seguro de agua potable, hay riesgos de un brote de diarrea o, incluso, de cólera’, dijo Shearer, antes de subrayar la importancia ‘vital’ de que las organizaciones humanitarias puedan ofrecer agua y otra ayuda para aliviar el sufrimiento de la población.