La sinusitis es una afección común que se presenta cuando los tejidos que recubren los senos paranasales se inflaman, lo que puede causar síntomas muy molestos.
“Afecta a millones de personas en todo el mundo, causando molestias significativas y, en algunos casos, complicaciones graves”, indicó el doctor Leonel Quiel Alba, otorrinolaringólogo de la Policlínica Dr. José Joaquín Vallarino Z., en Juan Díaz.
Explicó que, esta condición puede ser aguda o crónica y se presenta comúnmente después de un resfriado o como consecuencia de alergias. Ambas formas requieren atención médica para asegurar un tratamiento adecuado y minimizar el riesgo de complicaciones.
Se considera aguda cuando el tiempo de evolución es menor de tres semanas; subaguda, cuando los síntomas persisten entre tres semanas y tres meses; y crónica, cuando la duración de la enfermedad es mayor a tres meses.
Los síntomas incluyen congestión nasal, dolor facial, secreción nasal, tos, fiebre, y puede estar causada por infecciones virales, bacterianas, alérgicas o irritantes ambientales.
El doctor Quiel Alba, señaló que, estos síntomas, pueden afectar gravemente la calidad de vida de quienes la padecen, interfiriendo con el sueño, el trabajo y las actividades diarias.
Además, la sinusitis crónica, puede tener un impacto emocional considerable, aumentando el riesgo de ansiedad y depresión en los pacientes. En casos más severos, puede llevar a complicaciones como infecciones de oído, meningitis o infección en los ojos, añadió.
El otorrinolaringólogo, agregó que, esta condición puede afectar a una amplia variedad de personas, pero ciertos grupos son más vulnerables, como aquellos con antecedentes de alergias, asma, infecciones respiratorias frecuentes o anomalías estructurales nasales. También las personas expuestas a irritantes ambientales, como: el humo del tabaco o la contaminación del aire, tienen un mayor riesgo de desarrollar esta afección.
Su diagnóstico se realiza a través de un examen físico y la revisión de los síntomas del paciente. En algunos casos, se pueden realizar análisis adicionales, como: radiografías o una tomografía computarizada (TC), para evaluar la extensión de la inflamación y descartar otras condiciones. También se pueden realizar pruebas alérgicas para determinar si las alergias contribuyen a la sinusitis crónica.
Por último, el especialista, recomendó que, para prevenir la sinusitis, se debe comenzar con el cuidado de la salud respiratoria. Adoptar medidas de higiene adecuadas, como: lavarse las manos con regularidad y evitar el contacto cercano con personas enfermas, puede ayudar a reducir el riesgo de infecciones.
Además, mantener un ambiente limpio y libre de alérgenos, así como utilizar humidificadores en climas secos, puede ayudar a reducir el riesgo de desarrollar sinusitis.
Es importante que las personas con enfermedades respiratorias preexistentes, como: el asma, sigan un plan de manejo adecuado para evitar complicaciones.
Fuente: CSS