Las autoridades brasileñas iniciaron una operación en la ciudad de Boa Vista para trasladar a más de 800 venezolanos que dormían en una plaza hasta diversos albergues de la capital del estado de Roraima, punto de llegada para muchos de los que huyen de la crisis en ese país caribeño.
Unos 200 militares y 25 guardias civiles trabajaron desde primeras horas para el registro y desplazamiento de los venezolanos que estaban acampados en la plaza de Simón Bolívar de Boa Vista, ciudad que tiene 330,000 habitantes y es una de las capitales regionales más pobres del país.
Los inmigrantes fueron trasladados en autobuses hasta el albergue Latife Salomão, inaugurado el pasado 24 de abril, y al de Santa Tereza, que tiene capacidad para 500 personas.