Madrid (AFP) |

El prior de la comunidad benedictina que vigila el mausoleo de Francisco Franco advirtió este miércoles que impedirá el acceso a la basílica donde yacen los restos del dictador español para evitar su exhumación, ya autorizada por la justicia y la Iglesia.

El prior Santiago Cantera afirmó que “esta abadía no autoriza el acceso a la basílica (lugar de culto) con la finalidad de acceder a una +res sacra+ (sepultura)”, en una carta publicada por varios medios con fecha del 9 de octubre y enviada a la número dos del gobierno español, Carmen Calvo.

El monje benedictino, que fue candidato del partido de inspiración fascista La Falange en elecciones celebradas en los años 1990, alegó en su misiva “principios morales y religiosos” y “la inviolabilidad de los lugares de culto” y las sepulturas.

La exhumación de Franco de su mausoleo en el Valle de los Caídos, un monumental complejo situado cerca de Madrid, recibió en septiembre la autorización del Tribunal Supremo, la más alta institución jurídica del país, que rechazó un recurso de los descendientes del dictador.

La máxima corte respondió el miércoles a la familia de Franco que la negativa del prior a autorizar el acceso a la basílica se entiende por “decaída” desde que validó la exhumación mediante su sentencia “clara” del 24 de septiembre.

La Iglesia española aseguró de su lado a fines de septiembre que no se opondría a la exhumación de Franco.

El secretario general de la Conferencia Episcopal, Luis Argüello, estimó en ese momento que el prior “ha dicho que estaría a la escucha de lo que sus superiores jerárquicos dijeran”.

El prior estima en su carta que la “última palabra” la tendrá el Tribunal Constitucional y luego el Tribunal europeo de Derechos Humanos, ante los que prevén recurrir los herederos de Franco.

El gobierno del socialista Pedro Sánchez ha hecho de la exhumación de Franco una de sus prioridades, con el objetivo de que el dictador no siga siendo homenajeado en una “tumba de Estado”. Busca inhumar sus restos en un cementerio más discreto en el norte de Madrid, donde yace su esposa.

Vencedor en 1939 de la Guerra Civil que había iniciado junto a otros militares con un levantamiento contra la República, Franco dirigió España hasta su muerte en 1975, tiempo durante el que contó con el apoyo de la Iglesia.