Washington (EFE).- Ya son 96 las personas muertas en los incendios que han devastado la isla de Maui (Hawái, EE.UU.) durante la última semana, en el que se ha convertido en el fuego más dramático por el número de víctimas en Estados Unidos en el último siglo, y la prioridad se centra en seguir buscando a los cientos de desaparecidos.

Según las cifras publicadas este lunes por las autoridades locales, en las últimas horas han sido encontrados tres cuerpos más, lo que eleva el número de fallecidos a 96, aunque se teme que lo peor esté por llegar, porque se espera que los equipos de búsqueda, ayudados por perros especialistas, hallen muchos más cadáveres entre las ruinas carbonizadas de la histórica ciudad turística de Lahaina.

Hay cientos de desaparecidos todavía, si bien en muchas zonas no hay electricidad ni cobertura de móvil para contactar con ellos, y sus familiares y amigos se han movilizado en las redes sociales pidiendo ayuda para encontrarlos.

De hecho, el jefe del Departamento de Policía de Maui, John Pelletier, afirmó en una rueda de prensa el sábado que el proceso de búsqueda, recuperación e identificación aún se encuentra en su etapa inicial, por lo que el número de muertos aumentará y no está claro dónde terminará.