El 21 de marzo se celebra el Día Mundial del Síndrome de Down, el cual fue proclamado por las Naciones Unidas en 2011.

El Síndrome de Down, está definido como una combinación cromosómica natural que siempre ha formado parte de la condición humana y que existe en todas las regiones del mundo. Una persona con Síndrome de Down, puede crecer y desarrollarse como persona, siempre que se le garantice un acceso adecuado a la salud, a los programas de intervención temprana y a la enseñanza inclusiva.

En base a esto, el objetivo primordial del Día Mundial del Síndrome de Down, es forjar una mayor conciencia pública sobre la cuestión y recordar la dignidad inherente, la valía y las valiosas contribuciones de las personas con discapacidad intelectual como promotores del bienestar y de la diversidad de sus comunidades. De igual modo, se quiere resaltar la importancia de su autonomía e independencia individual, en particular la libertad de tomar sus propias decisiones.

Es importante resaltar, que para este 2019, la celebración del Día Mundial del Síndrome de Down, se centraliza en el lema “No dejar nadie atrás”. Por ello, es justo que actualmente,  todas las personas con Síndrome de Down, tengan la oportunidad de disfrutar de vidas plenas.

En lo educativo, a la fecha, existen centros escolares que brindan mayores opciones de inclusión a los niños y niñas con este tipo de discapacidad, una labor de gran interés y que sin duda alguna les permite no sólo a quienes lo padecen, sino también a sus padres, darles mayor apoyo y comprensión, para que los mismos, puedan desenvolverse en un ámbito más agradable en su entorno.