Con motivo del Día Nacional de la Espina Bífida, el Hospital de Especialidades Pediátricas Omar Torrijos Herrera (HEPOTH) de la Caja de Seguro Social (CSS), efectuó una celebración para concientizar sobre una condición que no es muy conocida.

Según reveló la doctora Celeste Alston, uróloga pediatra, la oportunidad también sirvió para celebrar el segundo aniversario de la Clínica de Espina Bífida en esta unidad de salud.

El evento, tuvo actividades de docencia y recreación para los niños y sus padres.

La espina bífida, es una condición que ocurre cuando los huesos de la columna vertebral no se forman adecuadamente lo cual produce que quede expuesta la médula espinal en forma de quiste, lo que a su vez provoca que los nervios que controlan la vejiga no funcionen adecuadamente. Esta condición igualmente produce anomalías en la locomoción y en los intestinos.

El manejo de estos pacientes es multidisciplinario, por tanto involucra a médicos neonatólogos, neurocirujanos, urólogos, nefrólogos, psiquiatras, ortopedas y personal de trabajo social, psicología y enfermeras; por mencionar algunos.

En lo que se refiere al tratamiento, el mismo, varía según el paciente. El tratamiento por cirugía, se puede efectuar antes o después del nacimiento. Si la espina bífida se diagnostica durante el embarazo, es recomendable realizar una cirugía fetal. El propósito es cerrar la abertura de la columna, protegiendo la médula expuesta para prevenir más daños en el tejido nervioso y para prevenir la infección.

De igual manera, también hay tratamientos con medicamentos y cateterismo que ayudan a controlar la vejiga, que es uno de los principales problemas que sufren los que padecen de esta condición. En ocasiones y dependiendo del tipo de problema se le inyecta botox a la vejiga.

Del mismo modo, es muy importante la prevención primaria. Las recomendaciones incluyen tomar un buen suplemento de ácido fólico desde 3 a 6 meses antes de producirse el embarazo, evitar la ingesta de tóxicos y fármacos teratógenos en el período periconcepcional, dieta equilibrada y el aporte de folatos desde el período preconcepcional, al menos tres meses antes de la concepción y hasta doce semanas de la gestación.

Sobre el tema, la doctora Alston, enfatizó, que el principal objetivo de la Clínica de Espina Bífida, es orientar al paciente y a los padres de familia o tutores, en el cuidado y control periódico de esta condición que no puede ser descuidada, porque podría traer consecuencias negativas a largo plazo.

La Clínica de Espina Bífida tiene un promedio total de atención de 120 pacientes aproximadamente.

El manejo oportuno y a temprana edad, permite que el paciente que padece de la condición de espina bífida pueda llevar una calidad de vida aceptable.