A medida que avanza la pandemia de coronavirus en todo el mundo, donde ya se han producido más de 413.467 contagiados y 18.433 muertos, según la OMS, se aprecian con más claridad las divergencias en las reacciones ante la crisis en algunos países punteros.

Dichas divergencias son en algunos casos tan evidentes que incluso se pueden verificar con una herramienta informática gratuita que se presentó hoy en la Universidad inglesa de Oxford y que incorpora sistemáticamente las medidas que toman los Gobiernos de todos los Estados tabulados.

La información procede de fuentes a disposición pública y la recopilan profesores y estudiantes de la Universidad de Oxford desde distintas partes del mundo.

LA “GRIPECITA” DE BOLSONARO

Una de las posturas divergentes más claras la protagoniza el presidente de Brasil, el ultraderechista Jair Bolsonaro, quien insistió hoy en menospreciar el avance de la pandemia en su país (el mayor y más poblado de Latinoamérica) y exigió que las medidas de confinamiento social se restrinjan a los ancianos y enfermos, en medio de las críticas de casi todos los sectores políticos.

“Si la política de aislamiento continúa, tendremos el caos y el virus juntos”, manifestó Bolsonaro en declaraciones a los periodistas en Brasilia.

Bolsonaro incidió en la línea del discurso televisado que pronunció anoche y en el que criticó abiertamente las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

En su alocución, Bolsonaro volvió a ir en dirección opuesta de la mayoría de los países en la lucha contra la pandemia, criticó el cierre de las escuelas y comercios en el país sudamericano e insistió en calificar el coronavirus de “gripecita”.

La mayor economía latinoamericana prevé un estancamiento del PIB en 2020, según los últimos cálculos del Ejecutivo, considerados demasiado optimistas por los analistas.

Las declaraciones de Bolsonaro generaron un aluvión de críticas en todos los sectores de la política, incluido el presidente del Congreso, Davi Alcolumbre, quien calificó de “grave” la posición del mandatario.

UN COMPLICADO CONFINAMIENTO EN LA INDIA

Por su parte, la India, con 1.300 millones de habitantes, el segundo país más poblado del mundo tras China y considerada la quinta economía del planeta, comenzó hoy el mayor y más largo periodo de confinamiento de una población muy vulnerable, en un intento por frenar las devastadoras consecuencias que podría tener la pandemia.

Durante 21 días casi un quinto de la población mundial estará “totalmente confinada” en sus viviendas debido a una medida anunciada anoche por el primer ministro indio, Narendra Modi, en un discurso a la nación.

Con 600 casos positivos de coronavirus y una decena de muertes, la India emplea con dureza las medidas que, según las estimaciones, podría golpearle con fuerza, dadas las deficiencias de su sistema sanitario.

El confinamiento de la India representa también un problema para el mercado global de medicamentos genéricos, advirtió a Efe una fuente del sector farmacéutico que subrayó que, aunque de momento no hay problemas de inventarios, el confinamiento podría afectar seriamente a la producción.

EEUU APUESTA POR UN MILLONARIO PLAN DE ESTÍMULO

Entretanto, en Estados Unidos la Casa Blanca y el Senado alcanzaron en las últimas horas el mayor paquete de estímulo económico de la historia del país, por el que se inyectarán dos billones de dólares para paliar los efectos en el tejido social y productivo causados por la pandemia, que avanza con rapidez y ya ha causado hasta el momento más de 54.000 contagiados y 775 muertos.

El plan supone una inyección masiva de ayuda financiera en una economía en dificultades, afectada por la pérdida de empleos, con disposiciones para ayudar tato a los trabajadores y familias estadounidenses afectados, como a las pequeñas empresas y las principales industrias, incluidas las aerolíneas.

El riesgo de que los sistemas sanitarios del Espacio Económico Europeo (integrado por la UE más Noruega, Islandia y Liechtenstein) y el Reino Unido se vean sobrepasados por la pandemia es “alto”, avisó hoy el Centro Europeo de Prevención y Control de Enfermedades (ECDC).

Los análisis realizados por el ECDC indican que, si la pandemia progresa al ritmo actual, sin contramedidas “firmes” y sin movilizar medios extraordinarios, hay una “alta probabilidad” de que la demanda en muchos países supere “de largo” la actual capacidad de cuidados intensivos.

En su séptimo análisis actualizado sobre el COVID-19, esta agencia dependiente de la Unión Europea (UE) resalta que el personal sanitario de todos los países europeos está bajo presión, que los recursos escasean y que hay saturación en la sanidad de España, Holanda, Francia y en partes de Italia.

Los casos de COVID-19 ascienden a 416.916 en más de 150 países, con 204.930 (y 11.810 muertes) en el EEE y el Reino Unido, en una proporción en aumento y con una tasa de notificación que crece siguiendo una trayectoria similar a la observada en la provincia china de Hubei a finales de enero y principios de febrero.

NUEVO DESCENSO EN EL NÚMERO DE MUERTOS EN ITALIA

El número de muertos con el coronavirus en Italia alcanzó hoy los 7.503, al registrarse 683 en 24 horas, una cifra inferior al día anterior.

Los casos positivos actuales ascienden a 57.521, 3.491 más respecto al lunes, con lo que bajan por cuarto día consecutivo los nuevos contagios, según los datos ofrecidos hoy por Protección Civil.

ESPAÑA, SEGUNDO PAÍS EN NÚMERO DE FALLECIMIENTOS

La pandemia se agravó hoy en España, que superó a China en el número de muertes, con un total de 3.434, mientras las autoridades nacionales y regionales luchan por controlar la extensión del virus y por lograr con urgencia los suministros médicos necesarios.

El sistema hospitalario español está “sobrecargado” y esta situación “seguirá creciendo” hasta que el nivel de nuevos positivos se reduzca, reconoció hoy el portavoz de Sanidad para la pandemia, Fernando Simón, durante la rueda de prensa diaria que ofrecen las autoridades.

La vicepresidenta primera del Gobierno español, la socialista Carmen Calvo, dio resultado positivo en el último test al que se sometió por coronavirus, informaron este martes fuentes del Ejecutivo.

Calvo, hospitalizada desde del pasado domingo por una infección respiratoria, había realizado pruebas anteriores con resultado negativo, y en la última de ellas sin resultados concluyentes, por lo que se le repitió el análisis.

Fuente: EFE