EFE

El gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, aseguró ayer miércoles que las restricciones impuestas en varias áreas de su ciudad afectadas por focos de covid-19 están funcionando y que la expansión de la pandemia en estas zonas está bajo control.

“Podemos manejarlo. Sabemos cómo volver a la senda correcta”, dijo Cuomo, que responsabilizó de estos picos a las personas que no cumplen las normas y a las autoridades locales que fallan a la hora de imponerlas.

Según el gobernador, el número de casos positivos detectados en las áreas con picos de infección se redujo del 7,9 % de casos detectados la última semana de septiembre, al 4,5 % de positivos registrados en siete días.

En Nueva York, los barrios más afectados están en los distritos de Queens y Brooklyn, y las autoridades han acusado a la comunidad ultraortodoxa judía, mayoritaria en muchas de estas zonas, de no respetar las normas de distanciamiento social y el uso de mascarillas.

Según la universidad Johns Hopkins, en el Estado de Nueva York han muerto más de 33.000 personas.