Berlín (AFP) |

 

Los judíos de Alemania se preparan para celebrar Shabat confiando en el renacimiento milagroso de la comunidad, sacudida por el fallido ataque antisemita en Halle, el día de Yom Kippur (del perdón judío).

Casi 75 años después del Holocausto, la minoría judía que había apostado por una Alemania pacífica y democrática, se interroga preocupada sobre su seguridad tras el asedio de la sinagoga por parte de un presunto neonazi.

“Siempre hemos sido cuidadosos y ahora lo seremos aún más”, dijo Nina Peretz, directora del grupo comunitario de la sinagoga Fraenkelufer, en Berlín.

Peretz habló horas antes del servicio que conmemora Shabat en el templo de la capital, destruido por los nazis durante el pogromo de la Kristallnacht (noche de los cristales rotos) en 1938, reconstruido después de la guerra y actualmente en proceso de renovación.

Varios miembros de la congregación, que se habían reunido en Halle para apoyar a su pequeña comunidad judía, serán recibidos en la sinagoga de Peretz en Berlín.

El miércoles, un aterrorizado grupo de unos 50 fieles se atrincheró en el interior mientras el alemán Stephan Balliet, de 27 años, trataba de penetrar en el templo de Halle con disparos y explosivos. Afortunadamente no pudo hacerlo.

Las autoridades dicen que tenía la intención de cometer una “masacre”. Al frustrarse su plan, disparó a dos personas aparentemente elegidas al azar.

Un video, que se cree fue hecho por el agresor, lo muestra lanzando una diatriba contra mujeres y judíos y negando el Holocausto, antes de comenzar el ataque.

Mientras la comunidad judía de 225.000 personas se prepara para terminar la semana, las llamadas a “llenar las sinagogas” abundaban en las redes sociales con el hashtag #showupforshabbat, que comenzó a raíz del tiroteo hace un año en la sinagoga Árbol de la Vida en Pittsburgo (EEUU) y que cobró 11 vidas.