Brasil entra en su sexto mes de pandemia a punto de contabilizar 100.000 muertos y sin perspectiva de salir de la tragedia.

“Es una tragedia, una de las peores cosas que ocurrió en Brasil”, dice el sociólogo Celso Rocha de Barros, en un momento en que el país de 212 millones de habitantes convive con un promedio diario de unos 1.000 muertos por el nuevo coronavirus.

Según Paulo Lotufo, epidemiólogo de la Universidad de Sao Paulo, “Brasil estaba más o menos organizándose para enfrentar la pandemia”. Pero ya en junio se convirtió en el segundo país con más muertes y más casos, después de Estados Unidos.

Para entender lo ocurrido, Lotufo destaca que los gobernadores y alcaldes reaccionaron de forma rápida, decretando cuarentenas y ampliando la capacidad hospitalaria.